Oh, gran Diosa, Reina de brujas y brujos, Señora de la Luna Argéntea, sabia Anciana milenaria poseedora de los más grandes secretos del Arte, Maestra divina de la hechicería. Tú que orgullosa yaces en tu trono de plata dominando la eterna sombra y que en las noches de viento recorres los caminos con tus feroces perras negras. A ti, que has sido invocada en los altares por milenios bajo muchos nombres como Isis, Astarte, Diana, Demeter, Kali, Inanna, Ishtar, Aztaroth, Aradia; yo te invoco, oh Triple Hekate. Desciende de tu trono y presencia nuestro rito; eleva nuestra magia hasta el infinito; llénanos con tu sabiduría y muéstranos el camino hacia los profundos misterios del Arte.